Nota de prensa
Este espectáculo plantea una reflexión sobre nuestra convivencia con el mundo de lo virtual. Mundo que, a pesar de ser cada vez más relevante para nuestra existencia, interpretamos como ilusión, como irrealidad, como engaño de los sentidos (o no). A partir de una investigación sobre el lenguaje audiovisual en el contexto de lo teatral, nos planteamos analizar las paradójicas relaciones entre corporeidad y virtualidad. Las tres dimensiones del escenario teatral, por donde se mueven los cuerpos de los intérpretes en tiempo real y en comunicación física con el espectador, se reducen a dos en nuestras pantallas. Superficies que se multiplican hasta el infinito en un mundo multipantalla que nos ofrece incontables reflejos contradictorios de lo que suponemos real.
¿Qué les pasa a nuestros cerebros, obligados a esta convivencia con esta infinitud de pantallas líquidas, de espejos múltiples a través de los cuales acceder a la realidad?