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Ignacio Muñoz
Allá por el año 2006, cuando se anunciaba el cierre definitivo y sin retorno del Teatro Albéniz de Madrid, pareció que la desaparición progresiva que en la Capital se está produciendo de locales y recintos dedicados a la difusión cultural, como cines y teatros, reconvirtiéndose en centros comerciales, gimnasios o bloques de viviendas, iba a cobrarse una nueva víctima justificada por oscuros intereses económicos. Daños colaterales del progreso y el crecimiento de las grandes ciudades, podría definirlo algún avezado manipulador de mentes.
Pero lo cierto es que Madrid se quedaría huérfana de una sala por la que han pasado varias generaciones de artistas de todos los colores e ideologías políticas, pero sobre todo varias generaciones de espectadores que al fin y al cabo son los verdaderos protagonistas y la razón de ser de la existencia de los escenarios.
Cuando gran parte del mundo de la cultura se preparaba ya para el luto teatral surgió la inquietud de cuatro personas, Eva y David Aladro Vico- hijos de Teresa Vico, la que fuera directora y alma del Albéniz desde 1986 hasta 2004-, Berta Delgado y Beltrán Gambier, la persona que daría forma legal a la reivindicación que pretendía salvar del cierre al Teatro. Juntos emprendieron una labor que se presumía imposible, pero con el convencimiento de que hay que luchar por aquello en lo que se cree aunque el objetivo pueda parecer utópico.
La inquietud y el inmenso trabajo de estas cuatro personas fueron contagiando a otros muchos hasta conseguir un movimiento en ayuda al Teatro Albéniz cuya repercusión mediática fue capaz de hacer pensar a las instituciones de que si se derribaba el edificio se infligiría un daño irreparable en el patrimonio cultural y social de la ciudad de Madrid.
Han tenido que pasar tres largos años desde que se iniciara esta aventura, han habido manifestaciones, creado plataformas de ayuda, denuncias en los juzgados, discrepancias entre Comunidad de Madrid y Ayuntamiento, creado un blog que contara los avatares de todo el movimiento hasta convertirse en el buque insignia de la reivindicación.
La historia de este blog “teatroalbeniz.blogspot.com” y debido a la volatilidad de los contenidos existentes en internet, es lo que ha movido a Eva Aladro Vico a recoger en el libro de reciente aparición, “ Salvar el Teatro Albéniz. Historia de un blog ” editorial Fragua, lo más representativo de su contenido, como continuación a toda la labor desarrollada en estos años y con la inquietud y la esperanza de que todo ese esfuerzo perdure en el tiempo en todos los formatos posibles.
Es curioso que el último capitulo del libro titulado El Albéniz reabrirá , haya servido como premonición de la afortunada noticia recibida recientemente de que esta emblemática sala del centro de Madrid volverá a abrir sus puertas en los primeros días del mes de junio de 2009.
“ Ave Albéniz ”.
