Menú
laRepúblicaCultural.es - Revista Digital
Inicio
LaRepúblicaCultural.es - Revista Digital
Síguenos
Hoy es Jueves 18 de abril de 2024
Números:
ISSN 2174 - 4092

Libertad de expresión relativa - LaRepúblicaCultural.es - Revista Digital

¿Libertad?¿Para qué? ¿Libertad?¿Qué libertad? Dice el Artículo 19 de la "Declaración Universal de los Derechos Humanos":"Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y de recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión". Basándonos en este artículo cabe reseñar que su fundamento parte de que todos los seres humanos son iguales ante la Ley, cosa que no se cumple, al menos en España. Hoy condenaban a dos profesionales del humor satírico mediante sentencia judicial y con el amparo de la Fiscalía (es decir, el Gobierno, y por tanto dos de los tres supuestos poderes independientes del Estado) a pagar 3.000€ de multa por una portada publicada en el mes de julio de este año, en la revista El Jueves.

Libertad de expresión relativa

Guillermo y Manuel condenados a pagar por injurias al príncipe

El Jueves condenado
Ampliar imagen

El Jueves condenado

El Jueves condenado
Ampliar imagen
El Jueves condenado

Julio Castro - La República Cultural

¿Libertad?¿Para qué? ¿Libertad?¿Qué libertad? Dice el Artículo 19 de la "Declaración Universal de los Derechos Humanos":"Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y de recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión".

Basándonos en este artículo cabe reseñar que su fundamento parte de que todos los seres humanos son iguales ante la Ley, cosa que no se cumple, al menos en España. Hoy condenaban a dos profesionales del humor satírico mediante sentencia judicial y con el amparo de la Fiscalía (es decir, el Gobierno, y por tanto dos de los tres supuestos poderes independientes del Estado) a pagar 3.000€ de multa por una portada publicada en el mes de julio de este año, en la revista El Jueves.

En primer lugar hay que recalcar que no se les condena por injurias, sino “por injurias al príncipe de España”. Esto es más grave, ya que demuestra que usted y yo somos iguales pero diferentes, ya que el delito subraya que va implícito en a quién se ha molestado, ofendido o faltado al respeto. Es de suponer que se trata de generar una jurisprudencia en este sentido, de manera que se está creando algo más que un precedente, se está abriendo una especie de “libro de estilo” de la ley en nuestro país, de manera que se escribe la ley aplicable en el caso de la corona, frente a la ley que se aplicará al resto del pueblo.

Podemos abundar en la cuestión, de manera que podríamos suponer que hay una ley de aplicación al vulgo, frente a una ley de aplicación contra el mismo, ya que aquella que salvaguarda a unos pocos frente a la mayoría es discriminatoria, establece diferencias, en definitiva: no es justa. Y por cuanto que no es justa, no es legislación, podrá llamarse muchas cosas, pero no legislación.

Disculparán ustedes mi poca profundidad en este campo de conocimiento del Derecho, pero no en el del conocimiento de lo que han sido y son las revoluciones y avances que han querido, a lo largo de la historia de la humanidad, liberar a esta de los atrasados yugos del mundo feudal.

Pues bien, en algunos sitios, la lucha fue vana.

Hoy nos encontramos con que en nuestro país se vulneran todos los derechos contra el pueblo, todos los preceptos básicos de la convivencia, de lo establecido en los principios de derechos humanos que, como vamos sumando palote a palote cada día, nos ofrece una cifra casi igual al articulado desarrollado en nuestra tan cacareada Constitución Española del ’78. Que debe ser del calibre 78, porque para lo único que se utiliza es para dispararla contra la ciudadanía y abrirnos profundos ojetes en las carnes, en las mentes y en la memoria.

Podría enumerar, incumplimiento tras incumplimiento, los artículos fundamentales de esa Carta Magna, (y olvidarnos de la del ’31, que siendo de menor calibre funcionaba mejor), pero aburriría al personal. Puedo decir vivienda, puedo decir trabajo, puedo decir salarios, puedo decir libertad de expresión, o de manifestación, o de culto, o sexual…. No queda mucho de las libertades. Ah, sí, los homosexuales pueden casarse (y me alegro de que se equiparen derechos), así ya todo es legal: enhorabuena a l@s premiad@s, como no soy homosexual ni me pienso casar, parece que me tocó esperar la tómbola de otra legislatura.

Esta legislatura parece que ni siquiera se puede debatir acerca de sueldo del rey y su familia, que lo pagamos tod@s. Sobre todo, porque no se conoce al detalle. Pero mándame tus impuestos, imbécil, que hay que pagar a estos.

El de la libertad de expresión también es uno de los Derechos Humanos: también. Como el derecho a una vida digna, como el de la no discriminación por razones de sexo, raza, procedencia, creencias… Pero en este nuestro país, creo que todo ha pasado a ser relativo y opinable.

Falta que los terroristas impongan su “opinión” sobre la vida ajena y el sistema les tenga en consideración: ah, ya lo hicieron en Madrid anteayer con un chaval de 16 años.

Guillermo, Manuel: me temo que os va a tocar pagar, vuestra opinión no vale.

Y tú ¿Por qué no te callas?

Alojados en NODO50.org
Licencia de Creative Commons