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Esther Andújar (y II): “el público sabe más de lo que pensamos, sobre todo, apreciar la honestidad de un artista” - LaRepúblicaCultural.es - Revista Digital

Concluimos con este artículo la entrevista a esta cantante que, hasta el momento ha centrado su estilo en el Jazz, pero que en su nuevo disco, que deseamos que esté pronto a disposición del público, nos introducirá en algunas de sus otras inquietudes musicales. Como ya quedaba claro en la primera parte, es una artista socialmente comprometida en su discurso o como ella misma dice “suele mojarse bastante”. Lo mejor es que no se limita a la crítica sino que en la mayoría de los casos tiene bastante claridad de ideas en cuanto a causas y consecuencias, pero tiene sus propias propuestas en lo referente a lo que la música y los músicos necesitan para un mejor desarrollo y para la subsistencia cultural.

Esther Andújar (y II): “el público sabe más de lo que pensamos, sobre todo, apreciar la honestidad de un artista”

En política cultural hay muchas diferencias de unas Comunidades a otras

Esther Andújar
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Esther Andújar

Esther Andújar en una actuación en la sala Colonial Norte, de Madrid.
Foto: Julio Castro.

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Esther Andújar

Esther Andújar en una actuación en la sala Colonial Norte, de Madrid.
Foto: Julio Castro.

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Julio Castro – La República Cultural

Concluimos con este artículo la entrevista a esta cantante que, hasta el momento ha centrado su estilo en el Jazz, pero que en su nuevo disco, que deseamos que esté pronto a disposición del público, nos introducirá en algunas de sus otras inquietudes musicales. Como ya quedaba claro en la primera parte, es una artista socialmente comprometida en su discurso o como ella misma dice “suele mojarse bastante”. Lo mejor es que no se limita a la crítica sino que en la mayoría de los casos tiene bastante claridad de ideas en cuanto a causas y consecuencias, pero tiene sus propias propuestas en lo referente a lo que la música y los músicos necesitan para un mejor desarrollo y para la subsistencia cultural.

 

¿Cómo ves la política cultural en estos momentos? ¿Crees que hay suficiente apoyo institucional a la cultura en general y a la música en particular?

Siempre se puede hacer más, pero veo que hay muchas diferencias de unas Comunidades a otras, según quién gobierne en cada una (y según cuál sea la tradición de cada una, también).

¿Crees que las cosas son más difíciles desde la Comunidad Valenciana que en Madrid, o cada lugar tiene sus entornos que permiten a los músicos salir adelante?

Muy diferentes no, pero un poquito sí. Por ejemplo, en Madrid me da la sensación (no sé si estoy equivocada) de que cada distrito o cada barrio, tiene una pequeña actividad cultural propia, más luego los grandes eventos que reúnen a más gente. También esto que se hace de abrir los museos por la noche… Creo que hay ciertas iniciativas que valoro muchísimo porque en mi ciudad no las tengo. Por ejemplo, el Festival de Jazz de Madrid, que se hace en muchas salas a la vez y es tan rico. Y están los clubs, las salas pequeñas, las salas grandes… hasta el circo Price. Es decir, me parece una manera de involucrar a toda la ciudad que si la gente no lo tuviera lo apreciaría de verdad.

En Valencia, mira que tenemos casas de cultura en cada pueblo, cantidad de museos en que se podría hacer música en directo, porque tienen pequeños auditorios y están muertos de risa. Estamos luchando para que eso cambie.

¿Ocurre así sea del signo que sea el municipio?

En los pueblos hay una serie de circuitos donde antes se programaba muchísimo jazz, pero de dos años a esta parte ha dejado de existir. Hay uno que se llama “La Xarxa”, que lo lleva la Diputación valenciana y es el ejemplo más claro: donde antes un músico hacía 10 ó 15 conciertos de esta red, ahora hace uno o dos. Porque estos ayuntamientos, los concejales de cultura son cada vez menos especializados en temas de cultura y porque el presupuesto para cultura cada vez es más bajo ¿vamos a llegar a tener que pagar por tocar? ¿Cuánto se debe por el concierto? (se ríe pensando en la situación).

Tampoco es correcto decir que todo está mal. Incluso, en cualquier bando político, porque he conocido en Valencia a gente muy válida y del PP, intentando hacer cosas. Políticos solitarios que van por ahí tirando del carro y haciendo cosas ¡Es alucinante!

¿Siendo mujer es más difícil también en el mundo musical?

Bueno, la música es tan solo una cosa más de este mundo, aunque hay profesiones que “son más de hombres”: la música es una de ellas. La gran mayoría son hombres. Me gustaría que las cosas no fuesen así, pero existe el machismo y unos prejuicios muy primitivos que pensaba que no existían, desde juzgar a la persona porque es mujer, pasando por juzgar a la persona por con quién está o con quién ha estado, y siguiendo por juzgarla por su aspecto físico.

Cosas que, si eres hombre, no se dan. A mí me ha pasado con críticos de jazz, leer una crítica y pensar ¿por qué este tío está pensando en mi maquillaje o en mi ropa? ¿Tengo que vestirme de “intelectual anti-depilación” para que me escuches? Para mí, un concierto es una cosa muy importante y pienso que me tengo que poner guapa, porque me lo pide el corazón, es un momento íntimo mío que le doy al público. Y este tío que está abajo… ¿por qué?

Pero desde este crítico de jazz hasta los músicos, muchas veces pueden llegar a ser muy crueles o muy abiertos. Me hubiera gustado encontrarme un poco menos de machismo en el mundo de la música. Aún los puestos importantes los tienen los hombres, aunque las que tiran del carro siempre son mujeres ¡siempre!

Nos decía Paula Bass el pasado año que, si eres una cantante negra en el jazz impresionará en este país, pero que si no, hay poco que hacer. Desde tu experiencia ¿crees que es así?

Esto es un poco cierto, pero la gente, tonta tampoco es. Si tu cantas soul o jazz va a dar un poco igual del color que seas. Está claro que te encontrarás con los prejuicios de los programadores de salas, de instituciones, concejales, etc. Esto existe aunque lo quieran negar, pero el público no es idiota.

Creo que el público sabe más de lo que pensamos y, sobre todo, apreciar la honestidad de un artista. Y si él sale ahí y hace jazz porque es lo que le sale del corazón, a la gente le da igual que seas chino, ruso o negro. Lo que pasa es que igual tardas un poco más porque eres blanco y tienes que vencer los prejuicios de unos cuantos. Pero imposible, creo que no es.

Es que estoy un poco positiva este mes (ríe de nuevo)

Probablemente eres una de las voces femeninas del jazz de nuestro país más premiadas y que más rápidamente han sonado en tantos sitios ¿crees que los premios pueden nublar un poco o siempre sirven para seguir adelante?

Bueno, creo que esto de cantar jazz es tan difícil como encontrar trufas, así que, si de vez en cuando te dan una palmadita y un ¡olé! anima un montón. Creo que es como todo, según te lo tomes. Si te subes a la parra y flipas, es tu problema, si lo tomas como una cosa de ánimo y tira adelante que merece la pena lo que haces, pues estupendo, porque pensabas que eras el único.

Como de pequeña en el cole, que yo era la única que escuchaba aquella música, pues está bien dejar de sentir eso y saber que a alguien más le gusta y que no estás solo en el mundo.

Hay mucha gente en el mundo musical que no consigue despuntar a pesar de tener gran calidad ¿qué habría que cambiar para que esto no fuese así?

No lo sé. Se pueden hacer muchas cosas para que los circuitos musicales estén más definidos. Por ejemplo, lo que te decía de la educación: falta en este país un circuito donde sepamos diferenciar quién es estudiante, quién amateur. Es decir, aún está por determinar cómo se consolida este oficio o cómo se perfila. Y a partir de eso, que viene de la educación (y las titulaciones que, aunque no nos guste es así), empiezan a definirse los circuitos: de conservatorio, de universidades, de pequeños clubs, casas de cultura, teatros…

El problema es que te metes en la música y no ves claro el camino que tienes que seguir (a diferencia de si eres cirujano, que sabes la trayectoria y que incluso está estipulado lo que tienes que cobrar en cada situación desde novato hasta master). En la música vamos dando palos de ciego, y en esos palos de ciego está el tener suerte o no.

¿Has tenido suerte?

Yo creo que sí, lo que pasa es que la gente me dice que todo ha ido muy rápido y yo no tengo esa sensación. Creo que más bien ha sido un trabajo estilo hormiguita. Pero lo que no voy a hacer es quejarme. A veces me dan rabia las quejas de algunas personas: hay que ponerse un poquito las pilas y entender que esto es un negocio como otro cualquiera y tientes que dar más y más sin parar, y ser mejor. Y si no, no hay nada que hacer.

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