Blanca Vázquez - La República Cultural
Aplaudimos sin reservas la unanimidad en los premios concedidos en Sitges 2010 a una singular película de Navidad, Rare Exports: A Christmas Tale del finlandés Jalmari Helander, contra aquellos que consideraron que fue quizás excesivo concederle al bizarro film el Premio a Mejor película, director y fotografía. Ya se los merece su atrevimiento, su novedoso planteamiento de cine autoral, su adelanto a Tim Burton, (estoy segura que Burton pensó alguna vez en filmar un Santa malévolo que se pasó al lado oscuro), en definitiva su avispada y sugerente propuesta, navideña para más “inri”, que tiene mucho de “vintage” y recuerda aquel cine aventurero de los ochenta.
Rare Exports Se estrena por fin en DVD y Blu-Ray con un cierto retrato, pero más vale tarde que nunca. La dirección y la fotografía son de un virtuosismo inusual, factura técnica y estética deslumbrantes. Helander centra la historia desde el punto de vista de un niño finlandés que vive con su padre y pocos hombres más en un pueblo perdido en la frontera entre Finlandia y Rusia, de belleza y crudeza a partes iguales. El niño, Pietari, transforma al espectador convirtiéndolo a la fe de los mitos navideños, aunque con una malévola y tenebrosa visión: Elfos guardianes, Santa Claus que come niños, sacos de patatas con niños dentro para un buen banquete, cuernos gigantes, pan de jengibre, calendario de adviento, niños con rifles, la nochebuena y la navidad en un entorno siniestro de excavaciones secretas donde el robo de alces, único sustento del pueblo, supone una catástrofe económica que hay que paliar de algún modo. Y solo el final, que no os contaremos!, aclara el título.
“El verdadero Santa Claus era muy diferente, el de Coca cola solo es un engaño” le dice Pietari a un amiguito. Todo un cuento de hadas…tenebroso y fantásticamente atractivo para adolescentes y mayores. Con alusiones muy interesantes al pueblo Sami, el pueblo aborigen de Escandinavia. Eso sí, remarcar como dato curioso que no hay un solo personaje femenino. “If you need something to wash the taste of good cheer out of your mouth”, nos gustó esta definición y la traemos a colación (Annalee Newitz, io9.com)
Por otro lado también se estrena, Arthur Christmas que el año pasado vimos en cine. Dos maneras de ambientar de Navidad nuestro cine casero, elegimos las dos.