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ISSN 2174 - 4092

Tom’s Cabin, pasión sobre un escenario - LaRepúblicaCultural.es - Revista Digital

Hacía muchos conciertos que no me encontraba con un arranque de actuación tan enérgico y bestial como el que protagonizó Tom’s Cabin. Resulta más que paradójico afirmar que arrancar con Song in my head y con Am i your son? pueda describirse como un comienzo poderoso. Teniendo en cuenta que su propuesta musical raya lo intimista y los ritmos son principalmente colindantes a la relajación, la tranquilidad y la suavidad tonal, no parece una apreciación muy acertada y sin embargo lo es. Es complicado describir ese momento, porque con palabras se me antoja un instante totalmente indescriptible. Lo que emocionalmente te hace sentir solo se puede experimentar viviéndolo en primera persona, solo se puede llegar a comprender y a recibir toda su dimensión si participas del evento in situ, físicamente. Lo que consiguen sobrepasa infinitamente lo que podamos percibir en el disco. Un disco lleno de canciones más que merecedoras de ser resaltadas y alabadas una por una, pero que se superan y se rehacen ellas mismas cuando son interpretadas sobre un escenario. Es de esos conciertos que justifican y aclaran porqué merece la pena pagar una entrada. De esos en los que la diferencia entre lo grabado en estudio y la representación "in vivo" se materializa en evidencia. Porque si en formato digital algo te engancha, ves que cuando lo recibes en directo te despiertas para vivir en toda su intensidad un sueño convertido en realidad. Antes de esa experiencia cuasi mística y para ir haciendo boca entonando el ambiente, le correspondía a When We Collide el privilegio y la responsabilidad de ser el telonero. Con un corte de melodías intimistas similar a lo que vendría después, presentándose solo ante el peligro, sin más apoyo que su voz y su guitarra, solventó una excelente actuación con gran dedicación y sorprendiendo por la calidad de sus composiciones, al menos para los que por primera vez nos acercábamos a su música. Esperemos que del pequeño estudio que tiene en su casa, es decir, su habitación, dé pronto el salto y se emancipe de "Hagoyotodo Records", como él mismo llama a su discográfica, a un estudio más competitivo. De momento ese habitáculo le sirve para lanzar su primer Ep Home, en el que sus canciones, ahí sí y no por la llegada del frío, aparecerán arropando y acompañando a la guitarra, arreglos de piano, trompetas, percusión y lo que sea estrictamente, o no, necesario. Le deseamos mucha suerte porque su material merece algo más que una oportunidad.

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Tom’s Cabin, pasión sobre un escenario

Un potente directo al calor de excelentes melodías

Tom's Cabin
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Tom’s Cabin

Tomás Hernández, Iñaki de las Cuevas y Conchita el concierto en la Sala Costello Club.
Foto: Raúl Martínez.

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Tomás Hernández durante el concierto en la Sala Costello Club.
Foto: Raúl Martínez.

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Ramami - La República Cultural

Hacía muchos conciertos que no me encontraba con un arranque de actuación tan enérgico y bestial como el que protagonizó Tom’s Cabin. Resulta más que paradójico afirmar que arrancar con Song in my head y con Am i your son? pueda describirse como un comienzo poderoso. Teniendo en cuenta que su propuesta musical raya lo intimista y los ritmos son principalmente colindantes a la relajación, la tranquilidad y la suavidad tonal, no parece una apreciación muy acertada y sin embargo lo es. Es complicado describir ese momento, porque con palabras se me antoja un instante totalmente indescriptible. Lo que emocionalmente te hace sentir solo se puede experimentar viviéndolo en primera persona, solo se puede llegar a comprender y a recibir toda su dimensión si participas del evento "in situ", físicamente. Lo que consiguen sobrepasa infinitamente lo que podamos percibir en el disco. Un disco lleno de canciones más que merecedoras de ser resaltadas y alabadas una por una, pero que se superan y se rehacen ellas mismas cuando son interpretadas sobre un escenario. Es de esos conciertos que justifican y aclaran porqué merece la pena pagar una entrada. De esos en los que la diferencia entre lo grabado en estudio y la representación "in vivo" se materializa en evidencia. Porque si en formato digital algo te engancha, ves que cuando lo recibes en directo te despiertas para vivir en toda su intensidad un sueño convertido en realidad.

Antes de esa experiencia cuasi mística y para ir haciendo boca entonando el ambiente, le correspondía a When We Collide el privilegio y la responsabilidad de ser el telonero. Con un corte de melodías intimistas similar a lo que vendría después, presentándose solo ante el peligro, sin más apoyo que su voz y su guitarra, solventó una excelente actuación con gran dedicación y sorprendiendo por la calidad de sus composiciones, al menos para los que por primera vez nos acercábamos a su música. Esperemos que del pequeño estudio que tiene en su casa, es decir, su habitación, dé pronto el salto y se emancipe de "Hagoyotodo Records", como él mismo llama a su discográfica, a un estudio más competitivo. De momento ese habitáculo le sirve para lanzar su primer Ep Home, en el que sus canciones, ahí sí y no por la llegada del frío, aparecerán arropando y acompañando a la guitarra, arreglos de piano, trompetas, percusión y lo que sea estrictamente, o no, necesario. Le deseamos mucha suerte porque su material merece algo más que una oportunidad.

Y por fin hace su aparición Tomás Hernández, o lo que es lo mismo, el tinerefeño que se esconde tras el nombre de Tom’s Cabin. Una tímida mirada pero penetrante precede a una recogida coleta que parece nacer de una poblada barba que le disimula la candidez para impregnarle de madurez y presencia; camisa de mangas remangadas, pantalón vaquero ajustado con doblez en los bajos que dejan libres a la vista unas botas tobilleras. Parece como recién salido de la Cabaña del Tío Tom pero en vez de llevar un hacha o una sierra para cortar leña, trae de la mano una guitarra con la que nos va a cortar algo más que la respiración y el aliento.

Su actuación se fundamentó en un formato semiacústico, por decirlo de alguna manera, dejó a un lado las florituras de los arreglos de violines o teclados, se agarró a una fuerte base rítmica compaginando la percusión de Conchita con colaboraciones puntuales de Chiloé, quién aparte de dar colorido rítmico, de vez en cuando se convertía en el aguador de zumo de cebada para hidratar a todo el equipo. Flanqueado por el bajo y productor del disco, Pablo Cebrián, y la guitarra eléctrica de Iñaki de las Cuevas, Tom no se separaba de su guitarra a pesar de tener canciones que van en distintos tonos, lo que le obliga a afinar continuamente sobre la marcha, momento que intenta rellenar con comentarios oportunos y que no consigue del todo ya que como él mismo confiesa: “aquí es donde se nota que soy hombre, no puedo hacer dos cosas a la vez”, por lo que abandona el intento de monólogo y vuelca todos sus sentidos y atenciones a su único fin, afinar. No por ello nos deja huérfanos en sus pretensiones de comunicarse con el público. Nos desnuda alguna de sus debilidades. Define el día como un poco desastre. Su relación con el tráfico y el callejeo por Madrid le han superado, al final desesperado aparca en Plaza España lo que le obliga a desplazar todos los bártulos por toda Gran Vía. Llega tarde al local. Casi no le da ni para las pruebas de sonido, por lo que educada y amablemente pide disculpas al técnico. Si no lo hubiera confesado no lo habríamos notado.

Lo que de momento es su único disco fue desfilando ante nuestros oídos. Cada corte, cada tema, tiene su aroma especial y como tal es tratado. A parte de ese comienzo tan introspectivo y tan impactante hubo más picos en esa montaña rusa emocional que nos había preparado. Liturgy, es un ejemplo más. Esa canción que nació de un estado onírico en el que estaba soñando que presenciaba un entierro y se despertaba sobresaltado al darse cuenta que el nombre que pronunciaba el cura era el suyo.

Valiéndose de la excusa de que en pocas fechas nos veríamos inmersos en el puente del Día de Todos los Santos, aprovecha para tocar su primer tema inédito de la noche, Halloween. Al principio la describe como una canción nueva, pero enseguida rectifica y dice: “no sé si se le puede llamar nueva a una canción que ya tiene por lo menos un año”. Le entendimos perfectamente, quería decir que es de las que no está incluida en el álbum. No sería la única. The witness y Broken wood también son composiciones recientes y a estas sí las podemos incluir en la categoría de nuevas pues no superan los cuatro meses de vida.

El momento más diferente se lo reservó a Olivia, que vendría con sorpresa incluida, pues la cantante Elena Iturrieta, más conocida como Ele, que acaba de sacar su primer disco, se subió al escenario para aportar su voz y su calidez.

La única cover de este bolo vino marcada por For whom the bell tolls, canción incluida en su disco y que sinceramente viendo la impronta y calidad de sus propias composiciones no entiendo muy bien la razón de tirar de Metálica, casi más bien lo entendería a la inversa, que Metálica le versionase a él. Solo hay que fijarse en los "crescendos" finales de sus canciones en los que hasta los oportunos gritos parecen pedir tímidamente permiso para compartir y disfrutar del hábitat en sus cálidas melodías.

Seguramente su mayor pecado y por tanto su mayor hándicap sea no ser anglosajón y más concretamente no proceder del mercado americano, porque de haber sido así ya tendría encima puestos, muy merecidamente, los ojos de las grandes compañías. Por el momento y egoístamente como espectador, aprovechemos ahora este presente y sigamos disfrutando como grandes privilegiados del lujo de estos hermosos instantes de intimidad y cercanía, porque en algún momento le llegará su merecido día y la propia masa le alejará de nuestra mira. Le agrandarán los escenarios, aumentarán sus seguidores y poco a poco se alejará de nuestra perspectiva, pero que tenga presente que una vez conquistados nadie se borra de sus filas.

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El pasado 3 de mayo, el grupo participó en la categoría estatal del festiMADtaste 2014 y el 15 de mayo en los Premios Rock Villa de Madrid 2014. Ambos concursos son un referente en la música independiente y emergente, cuya pretensión es potenciar a las bandas noveles y ayudarles a hacerse un hueco. Con tan solo quince minutos de actuación, en ambos casos, Tom’s Cabin deleito a los jueces con su mejor música y consiguieron hacerse con el primer premio de los dos certámenes.

En septiembre de 2013 Tom’s Cabin presentaba su trabajo de titulo homónimo. Un debut discográfico honesto, maduro y de producción impecable, que poco a poco ha ido conquistando a los medios y al público. Su primer single, The Brave, y su crudeza country, muestra la parte más visceral del álbum. La guitarra "slide" como protagonista y un ritmo casi tribal convierten a este tema en uno de los más celebrados en directo.

Después le siguió Hummingbird Hawk-Moth, corte encargado de abrir el álbum, que muestra la cara más luminosa del proyecto. Sencillos arreglos visten una canción en la que la guitarra arpegiada y la cálida melodía de voz cobran protagonismo para transportarnos a uno de los rincones más apacibles del disco.

Antes de esa experiencia cuasi mística y para ir haciendo boca entonando el ambiente, le correspondía a When We Collide el privilegio y la responsabilidad de ser el telonero. Con un corte de melodías intimistas similar a lo que vendría después, presentándose solo ante el peligro, sin más apoyo que su voz y su guitarra, solventó una excelente actuación con gran dedicación y sorprendiendo por la calidad de sus composiciones, al menos para los que por primera vez nos acercábamos a su música. Esperemos que del pequeño estudio que tiene en su casa, es decir, su habitación, dé pronto el salto y se emancipe de "Hagoyotodo Records", como él mismo llama a su discográfica, a un estudio más competitivo. De momento ese habitáculo le sirve para lanzar su primer Ep Home, en el que sus canciones, ahí sí y no por la llegada del frío, aparecerán arropando y acompañando a la guitarra, arreglos de piano, trompetas, percusión y lo que sea estrictamente, o no, necesario. Le deseamos mucha suerte porque su material merece algo más que una oportunidad. "> Fecha: el Viernes 24 de octubre de 2014

Horario: a las 21:30h

Lugar: Costello Club - c/ Caballero de Gracia, 10 (Madrid)

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Antes de esa experiencia cuasi mística y para ir haciendo boca entonando el ambiente, le correspondía a When We Collide el privilegio y la responsabilidad de ser el telonero. Con un corte de melodías intimistas similar a lo que vendría después, presentándose solo ante el peligro, sin más apoyo que su voz y su guitarra, solventó una excelente actuación con gran dedicación y sorprendiendo por la calidad de sus composiciones, al menos para los que por primera vez nos acercábamos a su música. Esperemos que del pequeño estudio que tiene en su casa, es decir, su habitación, dé pronto el salto y se emancipe de "Hagoyotodo Records", como él mismo llama a su discográfica, a un estudio más competitivo. De momento ese habitáculo le sirve para lanzar su primer Ep Home, en el que sus canciones, ahí sí y no por la llegada del frío, aparecerán arropando y acompañando a la guitarra, arreglos de piano, trompetas, percusión y lo que sea estrictamente, o no, necesario. Le deseamos mucha suerte porque su material merece algo más que una oportunidad. "> Fecha: el Viernes 24 de octubre de 2014

Horario: a las 21:30h

Lugar: Costello Club - c/ Caballero de Gracia, 10 (Madrid)

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Antes de esa experiencia cuasi mística y para ir haciendo boca entonando el ambiente, le correspondía a When We Collide el privilegio y la responsabilidad de ser el telonero. Con un corte de melodías intimistas similar a lo que vendría después, presentándose solo ante el peligro, sin más apoyo que su voz y su guitarra, solventó una excelente actuación con gran dedicación y sorprendiendo por la calidad de sus composiciones, al menos para los que por primera vez nos acercábamos a su música. Esperemos que del pequeño estudio que tiene en su casa, es decir, su habitación, dé pronto el salto y se emancipe de "Hagoyotodo Records", como él mismo llama a su discográfica, a un estudio más competitivo. De momento ese habitáculo le sirve para lanzar su primer Ep Home, en el que sus canciones, ahí sí y no por la llegada del frío, aparecerán arropando y acompañando a la guitarra, arreglos de piano, trompetas, percusión y lo que sea estrictamente, o no, necesario. Le deseamos mucha suerte porque su material merece algo más que una oportunidad. "> Fecha: el Viernes 30 de mayo de 2014

Horario: a las 22:00h

Lugar: La Boca del Lobo - c/ Echegaray, 11 (Madrid)

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DATOS RELACIONADOS

Formación
Tomás Hernández: Voz, guitarra
Pablo Cebrián: Bajo, guitarras
Iñaki de las Cuevas: Guitarra
Conchita: Batería

Set List: Song in my head; Am i your son?; Wooden boat; Liturgy; Doppelgänger; Hummingbird hawk-moth; Halloween; For whom the bell tolls; Olivia; The witness; Broken wood. Bises: The forest, The brave.

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